Soy una mujer de avanzada edad que aunque moderna y gracias a Dios con la cabeza funcionando aún. Mis músculos y huesos están resentidos. Y estoy sola. Esta empresa fue familiar. Tuvo un buen trato conmigo y no abusó en el precio de la reforma de baño para que yo me pudiera duchar y manejar sin barreras de forma cómoda y sin dolores por el esfuerzo del aseo diario.